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A principios de diciembre, en torno a la celebración de la Inmaculada Concepción de María, en Samaná, municipio de San Carlos, se celebran las Fiestas del Bosque y la Ganadería con las que los habitantes de este corregimiento no solo rinden homenaje a sus riquezas naturales, sino que también celebran el hecho de haber podido regresar a su tierra, ya que muchos de los vecinos de Samaná tuvieron que abandonar la población durante la década de 1990 por la violencia que vivió la región en el marco del conflicto armado.
Durante las fiestas los habitantes del corregimiento rinden homenaje a los bosques que rodean la población y recuerdan la importancia de cuidar y conservar la naturaleza con talleres y jornadas de separación de residuos, reforestación, recogida de basuras y reciclaje.
También se organizan cabalgatas en las que se pueden apreciar los hermosos paisajes del municipio de San Carlos con su cascadas, ríos, quebradas, piscinas naturales y bosques con especies endémicas.
Otro de los eventos principales de las fiestas es la feria agropecuaria a la que los ganaderos de la región acuden para exhibir sus mejores ejemplares.
Tampoco pueden faltar las tradicionales competencias deportivas y la música en vivo que reúne a los habitantes de Samaná en el parque principal para disfrutar y celebrar en comunidad.
Las Fiestas del Bosque y la Ganadería no solo son una ocasión para enamorarse de los paisajes de la región y generar conciencia sobre la importancia de cuidar el medio ambiente, sino que es un símbolo de la resiliencia de una comunidad que busca convertir su hogar en territorio de paz.
