Bojacá, pequeño municipio cuya cabecera se encuentra apenas 40 kilómetros al occidente de Bogotá, es uno de los principales destinos para hacer turismo religioso durante la Semana Santa para los habitantes de Cundinamarca.
Las celebraciones de Domingo de Ramos, jueves y viernes santos y la Vigilia Pascual se viven con particular devoción en la Parroquia de San Lorenzo Mártir, guardada por los padres dominicos que han llevado la doctrina del pueblo desde mediados del siglo XVII.
El Santuario de Nuestra Señora de la Salud es uno de los lugares más visitados por los devotos de la región gracias a la presencia de una imagen de la Virgen María considerada milagrosa. La imagen, traída a Colombia por el español José Pérez en 1739, reposa en el templo parroquial de Bojacá desde 1757 y a ella se le atribuyen numerosas curaciones de enfermedades y otros milagros.
La Semana Santa en Bojacá es una oportunidad perfecta para visitar este pequeño pueblo y enamorarse de su hermosa arquitectura colonial, de su fervor y su atmósfera de espiritualidad y tradición.